sábado, 27 de diciembre de 2008

Quiero montar un negocio.


Le dijo el joven zamorano a la persona que le atendía en el banco.
-Tengo el local mirado, me cobran “sólo” 1.500 euros al mes, pero aunque tengo algo ahorrado, necesito dinero para poder hacer la obra y poner en marcha la empresa. Necesitaría lo justo para ponerlo en marcha, en cuanto la cosa empezase a tirar “palante” ya me ocuparía de introducir mejoras, ponerlo a mi gusto y estoy convencido de que funcionaría ya que conozco a muchas personas, me sobran las ideas y todo el mundo me dice que tengo don de gentes. Al principio contrataría a dos emplead@s y luego ya veríamos. No puede fallar. Aquí tengo los números de la inversión (le dijo mientras intentaba entregarle la carpeta).
Había elegido su mejor ropa, se había duchado y se había afeitado y peinado para cuidar su aspecto al máximo intentando parecer una persona más seria y mayor de lo que era en realidad, quizás por eso había pasado más nervios de lo que esperaba, ya que en cierta forma se sentía un poco dentro de un disfraz. Su ansiedad se había disipado en cuanto había abordado al señor del otro de la mesa, señor que hasta ahora había permanecido callado.
Curtido en mil batallas y aleccionado desde lo más alto para combatir la crisis intentó elegir las palabras cuidadosamente ya que se sentía identificado con el emprendedor en potencia, ese mismo negocio se le había pasado mil veces por la cabeza, si bien su cómoda posición en la entidad bancaria y el ver a diario los montones de impagos sobre su escritorio, más en los últimos meses, le había hecho perder la ilusión, ilusión que ahora veía en los ojos de su interlocutor.
-Desconozco el alcance de las obras a ejecutar, no se si quieres pintar la fachada y el interior para lavarle la cara o si el local está en obra y tienes que meter tuberías, instalación eléctrica, tirar y levantar tabiques, poner techos, luz, insonorizarlo,…
¿Sabes cual es el tiempo medio desde que solicitas la licencia hasta que te la concede el ayuntamiento? Lo normal serían tres meses pero el plazo medio es de ocho meses y eso con suerte, conozco casos de más de un año.
Las licencias que hay que solicitar dependen de lo que se quiera hacer:
-. Si es un traspaso, sin obras, se solicita cambio de titularidad, que es
lo más barato y lo más rápido.
-. Si es una nueva actividad, hay que solicitar licencia de actividad y
después de apertura. Hay que tener en cuenta que la actividad es
clasificada.
-. Si hay que hacer obras, hay que solicitar la correspondiente licencia de
obras: mayores, menores o actuaciones comunicadas.
-Ya pero miré un local que traspasaban y me pedían 60.000 euros.
-Y con el local que has elegido: ¿vas a pagar el alquiler durante todo el tiempo que el ayuntamiento quiera? Por ejemplo: 1.500 por 12 ya son 18.000 euros, eso más la obra, proyecto, visado, licencia,…
-Bueno yo contaba con trabas burocráticas en el banco, se supone que los ayuntamientos están para ayudar a los ciudadanos, no se, hacernos la vida más fácil.
-Tú tranquilo que de las trabas de los bancos no te libras, yo sólo intento que veas la amplia y triste realidad que nos rodea.

Esa noche nuestr@ joven emprendor/a no pudo dormir, e incluso tuvo ideas absurdas como encadenarse a alguna columna de “su” ayuntamiento o iniciar una huelga de hambre llegado el caso. Tenía su lógica. Preferiría pasar hambre para intentar cambiar las cosas que pasar hambre por culpa de “la política”. Y persiguiendo su sueño, este le alcanzó de lleno.


*Dedicado a las personas con ilusión que luchan por alcanzar sus sueños y no se rinden ni ante las adversidades ni ante los políticos aunque a veces unas y otros sean los mismos.

*Foto: Portada del disco Crisis?What crisis? de Supertramp.

2 comentarios:

  1. Anónimo27/12/08

    Hooola!
    Por qué no haces algo sobre la ORA?
    Este tema puede dar cancha

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  2. Marchando tres de O.R.A.!!!

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